En nuestra página no encontrarás colchones de espuma básica, sí sirven para salir del paso, pero su durabilidad no está garantizada. Por eso lo que os ofrecemos en todos los casos son colchones de espumación HR o espumados patentados de materiales de altísima calidad.
La respuesta técnica es no, a día de hoy no se debe confundir un colchón de espuma con un colchón de espumación HR.
Nosotros no vendemos colchones de espuma en Colchones.es, no confiamos en su durabilidad a lo largo del tiempo y con ellos no os garantizamos que consigáis los 10 años de duración que se espera de cualquier colchón.
¿Pero qué distingue un colchón de espuma de una espumación? Su densidad. Los colchones de espuma son aquellos con 25 kilogramos o menos de densidad en el material principal de su núcleo, la espuma.
¿Y qué es la densidad de un material y que aporta la densidad de una espuma? Más densidad es igual a más cantidad de ese material utilizado para la fabricación del núcleo de ese colchón de espuma. Se mide en una relación entre peso y volumen, en el sector de la colchonería kilogramos y metros cúbicos, aunque la segunda variable relativa al volumen se omite. Así leeréis por ejemplo: una espuma de 26 kg. Más densidad no es igual a más firmeza, pues ésta también dependerá de la combinación de materiales usados para crear la espuma. Pero más densidad suele ser igual a más precio, mayor resilencia, mayor transpirabilidad, mayor resistencia al envejecimiento, a la humedad y a temperaturas elevadas.
El término High Resilience o espumación HR (Alta Resiliencia), se utiliza principalmente en el sector del descanso para denominar a las espumas utilizadas para la fabricación de colchones a partir del Isocianato. Son colchones con densidades superiores a 25 kg. en su espuma. La resilencia es la capacidad que tienen los materiales de recuperar su estado original después de haber sido sometidos a una presión.
Los colchones elaborados mediante espumación HR se caracterizan por su gran adaptabilidad y firmeza. Pertenecen a la familia de colchones de nueva generación sin muelles.
La respuesta es sí, pero depende del grosor del colchón, siendo recomendable un grosor no mayor de 20 cm. En este caso debería estar perfilado, para que al articularse no forme “montañas y valles” en donde no debe, se comporte con uniformidad sobre el somier articulado apoyando siempre sobre la superficie. Es aconsejable también que cuenten con acolchados en fibra, látex o viscoelástica y sean desenfundables, de esta forma obtendremos un descanso más fresco y podremos lavar la funda cuando toque.
Los modelos de muelles bicónicos o bonell, de carcasa, son el único tipo de colchón que no se deben articular. Si desea combinar un colchón con un somier articulado, en Colchones.es aconsejamos que optes por un colchón de Látex o de HR con una capa de viscoelástica.
La respuesta es no, no es lo más recomendable. Y no por la espumación, que aporta firmeza, evitando que te hundas lo que puede darte calor, sino por los acolchados, muy probablemente en viscoelástica, que aportan adaptabilidad, sensación de estar "acogido" y, por tanto, algo más de calor.
Los colchones de espumación HR se caracterizan por su buena adaptabilidad y casi nula transpiración, por lo que para personas de peso superior a 90 kilogramos o sudorosas/calurosas no son la mejor opción. Si el durmiente es caluroso o vive en una zona costera o con humedad, recomendamos que el colchón no tenga una capa de espuma superior a 2 centímetros de grueso y apoyar siempre sobre bases laminadas que favorecen la ventilación y evitan la condensación de humedad.
Las espumaciones más transpirables son la patente de Flex (espumación Airvex), la patente de Pikolín (espumación Bultex) y el látex.
Es lo más recomendable, sí. Los colchones de espumación HR deben girarse, al menos cada tres meses, para evitar que el colchón pierda sus propiedades, por el hecho de estar recibiendo siempre la misma presión -por el peso de nuestro cuerpo- en exactamente las mismas zonas.
Si además, el colchón, está pensado para usarse indistintamente por ambas caras, aunque fueran de composición diferente (por ejemplo, cara de invierno, cara de verano), deberemos girar el colchón y también voltearlo 1 vez de cada dos que lo giramos.